¿CÓMO HAGO PARA QUE UNA PERSONA VAYA AL PSICÓLOGO?
Me he encontrado algunos casos en los que son los familiares de los pacientes los que piden ayuda y acuden a mí para preguntarme sobre cómo convencerle para que vaya al psicólogo. Se encuentran bloqueados porque ven que esa persona que les importa, está sufriendo y rechaza una ayuda profesional. Normalmente suelen existir algunas objeciones o dudas que hace que se retrase o evite la ayuda de un psicólogo.
Las razones principales con las que me encuentro son:
- La persona cree que no es para tanto, que no está tan mal como para pedir ayuda.
- Considera que no van a saber qué le ocurre.
- Teme que crean que está loco.
- No considera que un psicólogo pueda ayudarlo.
- Nos confunde con los psiquiatras y piensa que puede acabar tomando fármacos y dejar ser él mismo.
- No sabe por dónde empezar a buscar un psicólogo.
- No desea contarle sus problemas a un desconocido porque piensa que le van a juzgar.
- En casos graves, como sería el caso de esquizofrenia o trastornos psicóticos, puede unirse la desconexión con la realidad.
- El coste de las sesiones.
El principal problema para un psicólogo es que la persona a la que tiene que ayudar, no quiera recibir esa ayuda o no considere que tenga un problema. Sólo si existe un mínimo de colaboración, el cliente podrá recibir información y realizar tareas que le ayuden a interiorizar soluciones y lograr solucionar su malestar.
Es importante que la persona que no quiere la ayuda psicológica tenga en cuenta algunas ideas para valorar un posible inicio de un tratamiento:
- Las personas somos bastante parecidas, tenemos nuestras diferencias, pero hay muchos procesos psicológicos que se repiten con frecuencia.
- Los psicólogos clínicos son profesionales que tienen una formación extensa sobre el comportamiento humano, y se especializan en el manejo estrategias de ayuda en situaciones en las que el malestar aparece.
- Existen diferentes enfoques terapéuticos, y hay estudios científicos relevantes que hablan de la eficacia de cada una de ellos.
- Probablemente la calma y el bienestar acaben apareciendo en algún momento tras estar mal, pero si podemos abreviar ese proceso ¿merece la pena intentarlo?
- Pueden encontrarse tratamientos en función del presupuesto de cada uno. Asociaciones y unidades clínicas de universidades, la seguridad social, y por supuesto gabinetes y centros privados.
CONSEJOS PARA FACILITAR LA ACEPTACIÓN DE LA AYUDA PSICOLÓGICA
- Escoge un buen momento y un lugar adecuado para proponer la idea de visitar a un psicólogo.
- Evite hablar durante las reuniones familiares o cuando exista algún conflicto abierto.
- Pregúntale sobre cómo se siente, escúchale y habla de las experiencias que también has vivido y que tengan similitud con las que le están contando.
- Aprovecha los momentos en los que la persona se sienta mal para hablar sobre una posible terapia.
- Deja que el otro pueda sentirse molesto y esté a la defensiva cuando se lo propone, no busques cambios rápidos.
- Pide que le dé una oportunidad a un psicólogo, siquiera para una primera cita.
- Facilite páginas web de profesionales que ayuden a formarse una imagen más adecuada de la ayuda que es posible recibir.
- Explíquele la diferencia entre un psicólogo y un psiquiatra.
- Facilite el proceso de búsqueda de un psicólogo y se tu quien pida la cita. Si finalmente decide no ir, consulte usted al psicólogo de todos modos. Habla con él acerca de cómo convencer a alguien para que vaya al psicólogo.
- Ofrécete a acompañarle a la primera consulta.
Existen casos con mayor o menor necesidad de ayuda. En función del riesgo que exista para su vida, los familiares y amigos tendrán que verse más forzados a insistir o forzar para que acepte la ayuda.